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Descubre qué ver en Pamplona con DareMapp.
Una ciudad con una rica historia, que data de la época romana cuando se llamaba Pompaelo a pesar de que a lo largo de los siglos, haya sido influenciada por los visigodos, moros y francos, antes de formar parte del Reino de Navarra.
Pamplona está rodeada por murallas medievales y es conocida por su centro histórico bien conservado, hermosos parques, jardines 🍂 y especialmente los 🐂 San Fermines🐂 imprescindibles a la hora de elegir los sitios que ver en Pamplona.
A través de divertidos juego, preguntas y la geolocalización te guiaremos por los puntos más importantes que ver en Pamplona:
-Plaza del Castillo
– Iglesia de San Saturnino
– Portal de Francia. Y mucho más…
El paseo tiene una duración aproximada de 1h30-2 horas
¡Acompáñanos a descubrir que ver en Pamplona con esta divertida visita interactiva!
Un camino por la Historia para descubrir qué ver en Pamplona.
Pamplona, es la capital de Navarra y fue fundada como Pompaelo por los romanos en el siglo I a.C, y ubicándose estratégicamente en el Camino de Santiago.
A lo largo de los siglos, ha sido influenciada por diversas culturas, incluidos visigodos, moros y francos, y fue parte esencial del Reino de Navarra. Sus bien conservadas murallas medievales y el casco antiguo reflejan su rica historia.
Internacionalmente reconocida por el festival de San Fermín y su emblemático encierro de toros, popularizado por Ernest Hemingway.
Pamplona es un núcleo de tradición y cultura. Hoy, combina su legado histórico con una vibrante vida social y cultural.
Qué ver en Pamplona en 1 día. Sitios claves.
Plaza de Toros de Pamplona y Monumento al Encierro.
La actual Plaza de Toros, fue diseñada por Francisco Urcola e inaugurada en 1922. Junto a la puerta del callejón, se encuentra el Monumento a Hemingway, realizado en 1968 por Luis Sanguino.
Es un punto clave que ver en Pamplona si eres amante de la tauromaquia pues es la segunda plaza de toros de España en capacidad, sólo superada por la de las Ventas.
En ella se celebran los espectáculos taurinos de San Fermín y el resto del año permanece cerrada, salvo los días en que se organizan conciertos o algún otro tipo de espectáculo. Cerca de la puerta principal se encuentra el Monumento al Encierro.
El conjunto escultórico está compuesto por toros inspirados en el hierro de Victorino Martín, cabestros y corredores que inmortalizan en bronce patinado, una instantánea del encierro por el tramo de la calle Estafeta. Con un peso superior a diez toneladas, queda asentado sobre una plataforma de hormigón armado y recubierta con loseta como la que cubre el suelo de la avenida de Carlos III.
El escultor vizcaíno Rafael Huerta concibe esta obra como homenaje a su tierra navarra de adopción.
Palacio de Navarra.
La fachada principal del Palacio de Navarra que ver en Pamplona está rematada por un grupo escultórico de Fructuoso Orduna (1951) que incluye el escudo de Navarra flanqueado por dos hombres: un montañés y un ribero.
En sendas hornacinas se encuentran las figuras en bronce de los reyes Sancho VII el Fuerte y Sancho el Mayor.
Los porches de esta fachada muestran aún efectos de un bombardeo durante la Guerra Civil española. Situado en la trasera del edificio, se encuentra uno de los pozos de nieve de la ciudad. Es cilíndrico y tiene 7 metros de profundidad.La nieve se almacenaba en su interior mediante un cuidado sistema de capas alternas de nieve y paja (de esta actividad procede el dicho de “limpio de polvo y paja”). Esta estructura era atendida por el “nevero”, la persona que se ocupaba de recoger la nieve, transportarla hasta aquí, bajarla, apilarla, prensarla y, posteriormente proveer de hielo a quien lo solicitaba.
Plaza del Castillo.
Plaza situada en el centro de la ciudad, es un espacio emblemático y cuenta con una extensión de 14.000 m cuadrados. De ella salen multitud de callejuelas del casco viejo y que ver en Pamplona.
Es donde se celebran los eventos más importantes de esta bonita ciudad. Hasta el año 1844 en ella se celebraban corridas de toros y torneos y batallas…
La Plaza se cerraba con tablas en varios puntos y los toriles estaban situados en una de las esquinas y utilizándose los balcones como palcos.
Curva de Estafeta (encierro)
La Curva de Estafeta es un lugar mítico que ver en Pamplona y que atrae a miles de personas durante las ferias de San Fermín.
Esta curva se ubica en la intersección de la calle Estafeta y Mercaderes, donde se encuentra una esquina típica de la ciudad, la cual incluye bares, cafés y muchas tiendas.
Los toros toman esta curva para llegar hasta la plaza de toros, donde el recorrido completo dura alrededor de 3 minutos.
El peligro aquí es real ya que los toros patinan y caen con facilidad debido a los adoquines en el suelo.
Catedral de Santa María la Real.
La Catedral de Santa María, obra culminación del gótico de los siglos XIV y XV. Este emblemático monumento es el que más reliquias histórico-artísticas atesora de la ciudad. En ella se coronaron los reyes, se reunieron las Cortes y durante tres siglos tuvo su sede la Diputación del Reino.
En el interior, la nave central alberga el bello sepulcro de Carlos III de Navarra y su esposa Leonor de Castilla. Pero la verdadera joya de esta Catedral es su claustro, considerado como uno de los más exquisitos del gótico universal.
Fuente de la Navarrería.
Con el diseño preparado desde varios años antes, esta fuente no se construyó hasta el año 1798, una vez aprobada por el rey Carlos IV la introducción en la ciudad de la cañería maestra del agua de Subiza, mediante un pequeño acueducto que hubo que hacer en el foso del baluarte de la Reina.
Pero hasta 7 años después no se vieron las primeras gotas en esta fuente con la autorización de la Real Orden.
Hoy es un punto clave qué ver en Bilbao para los visitantes extranjeros el día del chupinazo de las fiestas, pues después acuden a la fuente donde trepan por ella y se tiran para que el resto les coja abajo.
Mercado Santo Domingo.
A un par de minutos de la fuente de la Navarrería encontramos el Mercado local de Santo Domingo, el más antiguo de la ciudad.
El mercado de Santo Domingo se instala entre las plazas de Santiago y de los Burgos, paralelo a la famosa cuesta a la que debe su nombre, la cuesta de Santo Domingo.
Es un mercado tradicional situado sobre un patio central rectangular con infinidad de puestos de diferente índole donde ofrecen los mejores productos de la tierra, frutas tropicales, pescado del Cantábrico y del Mediterráneo, quesos de las más diversas denominaciones de origen.
Museo de Navarra.
El Museo fue fundado en 1956, aunque remodelado y reinaugurado en 1990. Fue el antiguo Hospital de Nuestra Señora de la Misericordia.
La portada plateresca es original del edificio, construido en el siglo XVI, al igual que el interior de la capilla. El resto se remodeló para conseguir espacio, que se reparten en cuatro plantas y un sótano.
Entre sus obras destacan, entre otros, el mosaico romano del Triunfo de Baco del S. I, los capiteles románicos de la antigua catedral de Pamplona, la arqueta mozárabe de Leyre o el retrato del Marqués de San Adrián de Francisco de Goya.
Imagen de San Fermín en la Cuesta de Santo Domingo.
Punto de inicio de cada uno de los encierros en la festividad de San Fermin. La hornacina donde está la réplica de la imagen de San Fermín es tan pequeña que pasa desapercibida, es donde cantan los mozos y está incrustada en el lienzo de la muralla de la famosa Cuesta de Santo Domingo que da inicio a los encierros.
Desde aquí antes de cada encierro los mozos se encomiendan a San Fermín y le piden piden protección y un buen encierro:
“A San Fermín pedimos,
por ser nuestro patrón,
nos guíe en el encierro
dándonos su bendición”.
Si bien los Sanfermines son mundialmente famosos, esta ciudad ofrece otras fiestas y eventos culturales a lo largo del año. Desde festivales de folclore y jazz hasta ciclos de cine y teatro, hay opciones que ver en Pamplona para todos los gustos.
Ayuntamiento de Pamplona.
Su origen se remonta a 1423, cuando Carlos III ordenó su construcción en el lugar donde confluían los burgos medievales. El actual edificio que ver en Pamplona se construyó entre 1753 y 1759, según el proyecto del maestro Juan Miguel de Goyeneta.
Los elementos arquitectónicos que forman la fachada son barrocos, así como la ornamentación de hojarasca, los elementos geométricos o los espejos con rocalla. Guardando la puerta del Ayuntamiento aparecen dos alegorías que representan a dos virtudes: a la Prudencia y a la Justicia.
En la parte superior del edificio aparecen dos Hércules, que simbolizan las virtudes cívicas, y en lo alto del conjunto está la alegoría de la Fama, pregonera de los fastos de la ciudad. El Ayuntamiento y la plaza Consistorial constituyen uno de los escenarios más importantes de los Sanfermines. Cada 6 de julio, se lanza desde aquí el Chupinazo, cohete anunciador de las fiestas.
Iglesia de San Saturnino.
La iglesia de San Saturnino, más comúnmente llamada de San Cernin, es un edificio religioso católico que ver en Pamplona en el Casco Viejo.
La actual iglesia es gótica del siglo XIII, sin embargo, existieron en el mismo emplazamiento una iglesia primitiva, y otra románica (siglo XII). En la Edad Media, cumplió una doble función: religiosa y defensiva.
Además de sus torres, destaca el pórtico, decorado con bellas tallas góticas como las de Santiago peregrino o San Saturnino, y el interior, gótico de nave única muy amplia con bóveda sexpartita.
Una veleta con forma de gallo corona la torre principal de la Iglesia.
Este «gallico de San Cernin» es uno de los emblemas más populares de la ciudad.
El reloj situado en la misma torre, construido en 1499, anuncia cada mañana sanferminera el momento del disparo del cohete que arranca el encierro.
Capilla San Fermín.
La Capilla de San Fermín se encuentra dentro de la Iglesia de San Lorenzo y del templo medieval original, que formaba parte de lo que antaño fuera el sistema defensivo de Pamplona, apenas se conserva hoy una torre.
La Capilla San Fermín, de aire neoclásico, que ver en Pamplona se encuentra nada más entrar a la derecha, y sobre el altar, se alza la venerada reliquia del Santo, una talla de medio cuerpo realizada en madera policromada y guarnecida en plata que data de fines del siglo XV.
Su semblante es oscuro, puede ser debido a que originariamente fuera negro o a que el humo de las velas lo haya oscurecido… De ahí, que al Santo se le haya atribuido también el calificativo de “morenico“.
La leyenda cuenta que San Fermín, hijo del senador Firmus que gobernó Pamplona en el siglo III, se convirtió al cristianismo y fue ordenado sacerdote en Toulouse.
Regresó a Pamplona como obispo y murió mártir en Francia el 25 de septiembre del año 303.
Jardines de la Taconera.
Los Jardines de la Taconera constituyen el parque más antiguo, hermoso y emblemático que ver en Pamplona. Con sus 90.000 metros cuadrados de superficie, se asienta en torno a las murallas, muy cerca del Casco Antiguo, dentro de un marcado estilo romántico y versallesco.
En todo él podemos pasear entre arboles, cuidados jardines, junto a las murallas y sus fosos…
A lo largo de sus paseos nos encontramos con numerosas fuentes, estatuas y monumentos como las de Julián Gayarre o la de la Mariblanca que en su día estuvo presidiendo la famosa plaza del castillo.
Si nos acercamos con niños, pueden divertirse en los columpios que allí nos encontramos además de ver gran cantidad de animales sueltos que conviven en los fosos de las murallas.
Remanso de paz siempre y cuando a sus habitantes no les de por hablar a todos juntos: ciervos, patos, pavos reales, distintos tipos de gallos y gallinas constituyen su vecindario.
Un lugar ideal para visitar con los pequeños y demostrarles que los animales también tienen cabida en el centro de la ciudad.
La Ciudadela.
Junto con la circundante Vuelta del Castillo constituye el gran pulmón verde de Pamplona. Un espacio de 280.000 metros cuadrados cuyos pabellones, fosos, baluartes, revellines, fortificaciones, edificios menores y glacis son hoy lugares públicos de ocio, deporte y cultura.
La Ciudadela, referencia urbanística que ver en Pamplona , está considerada además como el mejor ejemplo de arquitectura militar del Renacimiento español y uno de los más destacados conjuntos defensivos de Europa.
La Ciudadela nació para proteger Pamplona del enemigo, a instancias del rey Felipe II, quien la mandó construir en 1571 con el fin de hacer frente a las constantes incursiones del ejército francés. Su estructura original tenía forma de pentágono regular con cinco baluartes en los ángulos, pero la construcción del Primer Ensanche de la ciudad obligó al derribo de dos de ellos.
Otros sitios que ver en Pamplona.
Además de los sitios vistos en la guía existen varios sitios qué ver en Pamplona y que no te puedes perder:
Estadio de El SADAR: hogar del Club Atlético Osasuna desde su inauguración en 1967. Con una capacidad actual de más de 23,500 aficionados, ha sido recientemente modernizado para ofrecer mejores instalaciones y una experiencia de espectador mejorada. Conocido por su vibrante atmósfera y el ferviente apoyo de los seguidores locales, El Sadar representa un punto que ver en Pamplona crucial para la comunidad futbolística de la región, manteniendo una rica historia de encuentros deportivos memorables.
Paseo del Redín: Calle que bordea la muralla y con aspecto medieval y un puente muy fotogénico.
Ruta de pintxos por las calles estrechas y empedradas del Casco Antiguo. La cocina navarra es deliciosa y Pamplona es un lugar fantástico para probarla. Pinchos de chistorra, menestra de verduras, cordero asado… ¡prepárate para un festín!
Descubre pueblos cercanos que ver en Pamplona:
- Olite
- Artagona
- Javier
- Caparroso
Pamplona está cerca del País Vasco, así que puedes aprovechar tu visita para conocer un poco de su cultura y tradiciones. Hondarribia, San Sebastián y Getaria son algunos destinos cercanos que merecen la pena.
Hasta aquí nuestra recomendación de los que consideramos los mejores sitios que ver en Pamplona. Si quieres una experiencia completa con muchos más detalles, de forma digital y económica, descarga la app DareMapp y visita nuestra web para saber más.
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